"Este trabajo, realizado por payos y gitanos, ha servido a sus autores para descubrir algo muy evidente que por lo general no nos dejan ver los prejuicios y es que en todo grupo humano existen personas excelentes, buenas, normales, mediocres y malas y que en la sociedad española ha habido, hay y habrá, esperemos que cada día más, gitanos que han aportado y siguen aportando su esfuerzo y su saber a nuestra sociedad. Esta es la historia de gitanos que, sin renunciar a sus esencias, han emprendido el camino de la integración, en ocasiones con la incomprensión de ambos mundos".
"Deseamos que quienes lean este trabajo comprendan, como lo hemos hecho nosotros, que el pueblo gitano es mucho más que los estereotipos; que quienes afirman “los gitanos son así” están condenando sin conocer a todo un pueblo a la marginación y la miseria; que los jóvenes gitanos no deben asumir con resignación esa marginación y miseria a la que se condenan por no estudiar y a la que condenarán a sus propios hijos, si no les animan y ayudan a estudiar.
Si algo aparece medianamente claro en estas vidas que hemos seleccionado es que el estudio sirve para tener mejores trabajos, entender otras formas de vivir y valorar aún más nuestra identidad".