Prerrománico: San Miguel de Escalada

Orígenes:
AlfonsoIII El Magno (886-911) acoge en estas tierras a unos monjes huidos de Córdoba que construyeron la actual iglesia sobre un antiguo templo visigodo. Fue inaugurada en el 913, siendo rey García I (911-14) En el 1088 se termina una reconstrucción que posiblemente consistió en la prolongación del pórtico y la construcción de la torre.
Se aprecia claramente la existencia de dos construcciones; la iglesia mozárabe y la torre románica.

Estructura:

La La iglesia es de estilo mozárabe; en ella se mezclan elementos arquitectónicos propios del prerrománico asturiano y visigodo, con otros de clara influencia musulmana. Tiene tres naves de diferente altura con crucero no apreciable en el exterior al estilo de la arquitectura basilical del prerrománico asturiano.

Exterior:
El pórtico está formado por doce arcos de herradura; los siete arcos más occidentales pertenecen al siglo X (hacia el año 925) y los otros cinco son del siglo XI aunque imitan el estilo de los primeros.
Los capiteles de los arcos más antiguos son de estilo corintio y en su parte inferior portan un collarino sogueado. Los capiteles de los cinco arcos más modernos mantienen el mismo estilo aunque algo más recargado; son más grandes y tienen una cara plana, lo que indica que fueron pensados para ir adosados a un muro.
En el muro que cierra el pórtico por occidente, hay una pequeña ventana formada por dos arcos de herradura tallados en una sola pieza que se apoya en una columna de mármol con capitel corintio enmarcado en un alfiz musulmán.
Bajo los aleros del tejado hay modillones de roleos escalonados al estilo cordobés, pero decorados con rosetas y ruedas helicoidales de reminiscencia celta.
En los muros de la nave central hay un grupo de ventanas que proporcionan la luz interior, destacando las situadas en los hastiales (parte superior triangular de la fachada de un edificio) que están protegidas por celosías labradas sobre roca caliza.
En el hastial orientado al oeste se observa un friso en forma de dientes de sierra situado entre dos hileras de ladrillo, muy al gusto islámico.

Interior:
El juego de luces y penumbras conseguido por los ventanales antes mencionados con ayuda de los existentes en los ábsides, incitan al recogimiento.
La iglesia consta de tres naves separadas por cinco columnas. Toda la arquería es de herradura.
Separando el presbiterio de la nave central nos encontramos con un lienzo, sustentado en tres arcos, que aisla la zona sagrada; es el iconostasio.
Cegando los espacios entre las columnas debía estar situados los canceles de caliza esculpidos por una de sus caras con motivos geométricos, animales y vegetales, propios del arte visigodo, pero también con la palmera, símbolo islámico, que representa el Paraíso.
Enmarcando el recinto sagrado encontramos otra decoración de origen oriental: un friso compuesto en su mayoría por águilas y leones entrelazados con hojas de palmera.

En lo alto de los ábsides se encuentran unas cámaras no visibles que pudieron servir de escondite, de penitencia...
El artesonado es de época posterior (siglos XIV o XV) y en el se representan los escudos de Castilla y de León.